Fomentar la participación de la ciudadanía madrileña en la construcción de un modelo de desarrollo
sostenible en la ciudad y de su difusión a través del sistema educativo. Para ello, se trabaja con el alumnado
y profesorado de los centros educativos, su apertura y trabajo con la comunidad en la que se insertan y la
creación de un cuerpo teórico-práctico para la replicabilidad del proyecto.