«Para reconstruir el espíritu de un pueblo y sanar tanto dolor hace falta mucho más tiempo que para reconstruir los edificios de una ciudad» Dan Corrou SJ, Director regional de JRS en Oriente Medio.
Líbano lleva años inmerso en una crisis multifacética a nivel político-social, económico, sanitario y educativo, agravada por la irrupción de la COVID-19 y las explosiones en el puerto de Beirut en agosto de 2020. El gobierno libanés estima que el país alberga a 1,5 millones de personas de nacionalidad siria que han huido del conflicto desde 2011, convirtiéndose en el país con el mayor número de personas refugiadas en proporción a su población (una de cada seis personas es refugiada).
La respuesta desde Entreculturas y el Servicio Jesuita de Refugiados ante la crisis en Líbano
En respuesta a este desafío humanitario, desde Entreculturas y el Servicio Jesuita de Refugiados, con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), hemos llevado a cabo desde 2019 el proyecto ´Protección para la población refugiada en Líbano´. Hemos acompañado a más de 4.945 niñas y mujeres y 2.938 niños y hombres refugiados sirios, específicamente en seis colegios y dos centros sociales en las localidades de Baalbek y Bar Elias para fortalecer su resiliencia y mejorar su bienestar físico, psicológico y social.
Además de proporcionar una respuesta inmediata a las necesidades de protección y educación de las personas refugiadas sirias y las comunidades de acogida en Líbano, también hemos trabajado hacia la construcción de una paz sostenible y el desarrollo a largo plazo a través de cuatro líneas de acción principales:
- La creación de espacios seguros de aprendizaje y recuperación para niños y niñas
- El fortalecimiento de la capacidad de las mujeres
- La provisión de servicios de salud mental y apoyo psicosocial
- El trabajo en red para garantizar el acceso a servicios que promuevan el ejercicio de derechos
Este enfoque integral no solo abordó las necesidades inmediatas de las comunidades afectadas, sino que también trabajó hacia la creación de condiciones que permitieran a las personas refugiadas y a las comunidades de acogida construir un futuro más seguro, pacífico y próspero
A través de esta propuesta reafirmamos nuestro compromiso con la promoción de los derechos humanos, en especial al derecho a la educación como una herramienta fundamental de cambio y acceso a otros derechos fundamentales.
Evaluación del proyecto
Hoy presentamos el cuaderno de evaluación del proyecto, titulado «Construyendo Paz y Esperanza», en el que recogemos y ampliamos las principales conclusiones y recomendaciones que surgieron de este proceso evaluativo.
Entre las conclusiones, destaca la participación y percepción positiva de seguridad en las escuelas del JRS, con estudiantes expresando su deseo de continuar su trayectoria educativa. La participación de las mujeres y familias en procesos de sensibilización también fue clave.
En cuanto a las recomendaciones, se identifica la necesidad de mejorar la coordinación y ampliar el servicio de atención psicológica para abordar adecuadamente los desafíos de salud mental. Además, se propone establecer comités de apoyo comunitario y redes de mujeres y niñas, así como comités de padres para fortalecer la comunicación con la escuela.
Compromiso por la paz renovado
En 2024 se extendió la colaboración con AECID con un nuevo Convenio de otros cuatro años, desde un enfoque orientado a impulsar la cohesión social con la comunidad local. A través de este Convenio y el informe de evaluación actual, reafirmamos nuestra apuesta y compromiso por la paz, la justicia y el derecho a la educación como herramientas clave para el cambio, asegurando una base para crear horizontes de vida dignos y seguros para las poblaciones afectadas por crisis y conflictos armados.
- Consulta todo nuestro trabajo de evaluación y nuestras publicaciones relacionadas en entreculturas.org/evaluamos