Tras el terremoto que sufrió en 2015, Nepal se ha ido reconstruyendo desde la base de la educación, la protección, la seguridad y el acceso a las necesidades básicas, como son la alimentación, el agua y la sanidad. Todavía queda mucho por lograr, ya que el terremoto quebró muchos hogares e infraestructuras, pero los avances han sido numerosos; como también son muchos los aprendizajes que podemos extraer de este pueblo que ha vuelto a ponerse en pie tras vivir una emergencia.
Después de una primera fase de atención a las necesidades más inmediatas, desde el Instituto Social Jesuita de Nepal (NJSI) y la Red Xavier (la red de ONG jesuitas de desarrollo a nivel europeo, de la que Entreculturas forma parte) hemos iniciado una nueva etapa de trabajo, centrada en la recuperación, la superación y la resiliencia. Durante el pasado año, nuestro Programa de Reconstrucción se centró en los sectores de educación, medios de vida y protección de la población, principalmente de las personas más vulnerables (las mujeres, los niños y niñas y las personas que padecen alguna discapacidad).
Como explica nuestra compañera Pilar López-Dafonte, responsable de Acción Humanitaria de Entreculturas, “El programa de Reconstrucción tiene una visión integral que implica la participación activa de las comunidades, principalmente rurales, donde se está implementando. El objetivo es promover un cambio cualitativo en el desarrollo psicosocial y económico de las personas más vulnerables con las que se trabaja y el NJSI se ha convertido en un agente social fundamental para promover dicho proceso”.
La educación, pieza clave en la reconstrucción
El terremoto afectó de forma considerable a las infraestructuras educativas y al alumnado, que quedó sin la posibilidad de poder ir a la escuela en algunas de las zonas rurales del país. Desde el NJSI y la Red Xavier detectamos que era fundamental mejorar la tasa de escolarización del alumnado en los distritos afectados por el terremoto, no solo estableciendo el foco en los alumnos y alumnas, sino también haciendo partícipes del proyecto a los padres y madres y a la comunidad educativa.
Para ello, hemos llevado a cabo mejoras en las instalaciones escolares y hemos trabajado en crear conciencia sobre la importancia de la educación mediante la capacitación de padres, madres y docentes en un total de 8 distritos: Sindhupalchowk, Dolakha, Jhapa, Sindhuli, Kavre, Dhading, Lalitpur y Ramechhap. Hasta la fecha hemos logrado que más de 1.570 estudiantes accedan a una mejor educación.
Además de fomentar la escolarización, hemos llevado a cabo programas de Desarrollo Personal para el alumnado, relacionados con los derechos de la infancia, la orientación académica superior, el emprendimiento y la concienciación medioambiental, y hemos ofrecido programas a los profesores y las profesoras para que mejoren su formación y su motivación.
Agua y agricultura para mejorar el nivel de vida
Pese a que Nepal es el segundo país del mundo en recursos hídricos, más del 20% de la población en el país no tiene acceso a agua, un elemento fundamental para la vida y el desarrollo de los medios de vida. Uno de los principales retos que enfrentamos junto al NJSI es brindar acceso de la población a agua potable, especialmente a aquellos hogares que se encuentran dispersos en zonas rurales. A través de nuestros proyectos hemos logrado que más de 100 hogares tengan acceso a agua.
Es por ello que junto al NJSI llevamos a cabo capacitaciones en agricultura sostenible y proyectos de irrigación de agua que tienen como objetivo mejorar y aumentar la producción agrícola con técnicas respetuosas con el medio ambiente. De forma paralela, brindamos talleres de formación en corte y confección, secretariado y fabricación de jabón artesanal cuya producción es vendida en los mercados locales.
Fomentando la igualdad de oportunidades
En la sociedad nepalí, las mujeres pertenecen al principal grupo vulnerable debido a la discriminación que existe hacia ellas. Para el NJSI y la Red Xavier también es clave apostar por proyectos que garanticen la igualdad de oportunidades y por ello que se ha diseñado una línea específica de promoción social enfocado hacia la mujer en entornos rurales.
Uno de los aspectos que contempla esta línea de trabajo son los llamados Women’s hall (espacios mujer), pequeñas instalaciones ubicadas en las comunidades rurales donde trabaja el NJSI. Son espacios de protección para las mujeres donde se desarrollan capacitaciones, actividades y reuniones. Hasta ahora el NJSI ha construído más de 20 instalaciones, que han ido convirtiéndose en lugares de convivencia y desarrollo de las comunidades.
Durante este último año, además, hemos llevado a cabo actividades de concienciación y sensibilización sobre los derechos fundamentales dirigidos principalmente a combatir la violencia de género.