La profunda crisis que vive Nicaragua se acerca ya a su primer año. Este periodo se ha saldado con más de 500 muertos, más de 700 personas detenidas arbitrariamente y miles de personas que han desaparecido o han huido del país. El régimen de Daniel Ortega ha incrementado su represión en las calles y contra los medios y ha expulsado del país a quien se ha atrevido a denunciar violaciones de derechos humanos, como ha sido el caso de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos dependiente de la OEA lo que ha acelerado su aislamiento internacional y advertencias del Parlamento Europeo y la administración de EEUU.
Para sacar al país de la crisis se han comenzado conversaciones entre el régimen de Daniel Ortega y la oposición en la llamada Mesa de Diálogo Nacional. Tras un parón se han reanudado dichas conversaciones para abordar tres temas fundamentales:
- Liberación de los presos políticos y el restablecimiento de las libertades, derechos y garantías,establecidos por la Constitución Política.
- Reformas electorales que garanticen unas elecciones justas, libres y transparentes.
- Justicia.
Compartimos el comunicado de la Articulación de Movimientos Sociales y que insta a la comunidad internacional a:
- Demandar, a través de protestas, comunicados o declaraciones, al gobierno de Nicaragua muestras de verdadera voluntad política. Cumpliendo con la liberación de presas y presos políticos, cese de todo tipo de represión y el reingreso de los organismos internacionales.
- Mantener la presión a través de resoluciones y sanciones, pues es evidente que el régimen ya usó de excusa el diálogo para oxigenarse. Durante la mesa de Diálogo iniciada en mayo 2018 la dictadura ordenó la “Operación Limpieza” que provocó la mayor matanza de los últimos meses.
- Aumentar la presión si la dictadura no demuestra su voluntad política para una salida pacífica y negociada y exigir el cese inmediato de todas las formas de represión que actualmente ejerce.
- Exigir la participación de organismos internacionales como mediadores, testigos o garantes una vez se cumplan las condiciones para iniciar las negociaciones, así como el reingreso de CIDH, MESENI, GIEI y OACNUDH, y el acompañamiento posterior a procesos de justicia universal a través de instancias contra el crimen y la impunidad.
- Apoyar una resolución en el marco del 40° período de sesiones ordinarias del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
- Continuar con la movilización y presión social desde los SOS-Nicaragua y los Comités de Solidaridad, exigiendo la liberación absoluta de presos y presas, así como la agenda de justicia y democracia.
Foto: Katie Simmons-Barth Photography.
Fuente: CPAL.
