El proyecto tiene como objetivo mejorar las capacidades de exigir derechos humanos por parte de grupos de
población vulnerable y defensores de Derechos humanos. Para ello, se pusieron en marcha dos líneas: 1)
Sensibilización social de la opinión pública (especialmente de periodistas y estudiantes de comunicación y
jóvenes) y 2) denuncia en el ámbito político, fortaleciendo a los grupos vulnerables.