El proyecto se enfoca en comunidades urbano marginales de las provincias de Los Ríos, Pichincha y
Chimborazo que no contaban con educación básica completa, lo que hacía limitar las opciones de los
estudiantes para continuar sus estudios, una vez que concluían el 7º año de educación básica. La
intervención se ha centrado en ampliar la oferta educativa hasta el 10º curso en 4 centros de estas zonas.