El pasado 10 de marzo, tuvo lugar la presentación del cuento “Afaf y el Huevo Dorado” en la Casa de la Mujer en Yamena, Chad.
El cuento infantil “Afaf y el Huevo Dorado”, escrito e ilustrado por la artista multidisciplinar Salma Khalil, nace de seis talleres celebrados a finales de noviembre en Chad, en los que participaron más de 60 niñas y adolescentes de tres campos de refugiados. Afaf, la protagonista de la historia, y el resto de habitantes del pueblo Bonheur Bonheur parecen surgir de la más pura fantasía, sin embargo, son un fiel reflejo del imaginario, recuerdos y vida cotidiana de las niñas en situación de desplazamiento forzoso en Chad.
En este proyecto, realizado con Entreculturas y el Servicio Jesuita a Refugiados, en el marco de la Campaña La LUZ de las NIÑAS, Salma ha conseguido unir su estilo al de los dibujos y creaciones de arcilla realizados por las niñas, plasmando en él sus sueños e inquietudes.
El evento comenzó con la intervención del Director Nacional del SJR Chad, Denis Codjo, que expuso el trabajo que, junto con el SJR, realizamos en Chad a través del programa LUZ de las NIÑAS y agradeció su presencia a los más de 55 invitados, entre los que se encontraban personalidades del mundo del arte, organizaciones como OCHA y UNICEF, la Representante de la Embajada de Estados Unidos en Chad o la Representante del Ministerio de la Mujer y de la Protección de la Pequeña Infancia, que ofreció un pequeño discurso sobre la importancia de la educación de las niñas.
La presentación contó, además, con la presencia de nuestra organización social Fe y Alegría Chad y su Director Tsayem Dongmo. Minitaknde Casimir, personal técnico de educación de Fe y Alegría, expuso el trabajo de la organización en Chad y realizó una pequeña presentación sobre la importancia del cuento y su potente valor en la educación como herramienta pedagógica.
Tras la intervención de Fe y Alegría llegó uno de los momentos más esperados; la lectura del cuento. Cuatro de las niñas refugiadas que participaron en los talleres de creación contaron el cuento junto con la artista, Salma Khalil, dando paso al visionado de un pequeño documental de 11 minutos sobre el proceso de creación, en el que se exponen los testimonios de las niñas, que versaron sobre sus sueños de futuro, la importancia de la educación para sus vidas y su experiencia en los talleres. Este fue uno de los momentos más emocionantes y aplaudidos por el público allí presente.
“He dibujado árboles, mujeres con diplomas y mujeres piloto. Cuando sea mayor voy a ser enfermera para salvar la vida a la gente», cuenta Habiba, una de las niñas participantes.
El evento terminó con las emotivas palabras de la artista, Salma, que quiso compartir sus experiencias e ideas con los allí presentes.
«Cuando tenía 8 años le dije a mi papá que quería convertirme en niño porque me gustaría escribir libros. Mi padre me dijo que yo podía hacer lo mismo que los hombres y fue ahí donde algo hizo clic en mí».
“Durante los talleres de creación con las niñas, han compartido y hablado entre ellas. Es muy importante que la energía circule. Eso es la luz. Si queremos lograr el desarrollo y la paz necesitamos de las niñas y tenemos que animarlas como mi padre lo hizo conmigo”, comentó Salma a modo de cierre.