Más de 34.000 refugiados y solicitantes de asilo viven en Angola procedentes de  distintos países; muchos de ellos dejan sus países de origen a causa de los conflictos bélicos, la inseguridad, la persecución y algunos en búsqueda de una vida mejor. En esta provincia, Lunda-Norte, hay mucha pobreza y los refugiados y solicitantes de asilo se encuentran en una situación muy difícil donde sus necesidades básicas no están satisfechas y sus derechos no son respetados.

El Servicio Jesuita a Refugiados (JRS) lleva trabajando con los refugiados desde 2008 para asegurar que tengan acceso a la asistencia jurídica y que tengan sus necesidades básicas cubiertas. JRS cree que la manera más efectiva de conseguir la integración de los refugiados en la sociedad local es a través de actividades que generen ingresos. 

Este proyecto pretende dotar a los beneficiarios con las capacidades (humanas y materiales) para poder ganar un ingreso, integrarse en la sociedad angoleña y así vivir con dignidad. Las actividades incluyen unas sesiones de formación vocacional y distribución de kits para montar un micro-negocio para 10 beneficiarios y unos talleres de capacitación sobre la gestión de micro-negocios.