Más de una quincena de muertos en enfrentamientos entre campesinos y policías en Paraguay
"Como se habrán enterado por algunos medios de comunicación, ayer viernes 15 de junio, en una intervención policial en una zona distante a unos 250 km de Asunción para llevar a cabo un allanamiento a una propiedad invadida por los campesinos sin tierras, se produjeron enfrentamientos entre uno y otro sector, dejando como saldos la muerte de unos 6 policías, una decena de campesinos y un tendal de heridos con armas de fuego. Ante estos hechos, que dejarán profundas secuelas para la convivencia armónica y búsqueda de soluciones a los problemas sociales acuciantes en el país, elevamos nuestra propuesta y apuesta por el diálogo para la búsqueda de solución desde las verdaderas causas y pedimos no "buscar chivos expiatorios ni cacerías de brujas" por parte de las fuerzas de seguridad para "pasar facturas" a los sectores más vulnerables y desprotegidos en este momento como son los campesinos", rezaba el mail con el que Carlos Caballero SJ, Director de Fe y Alegría - Paraguay, nos avanzaba lo ocurrido.
Los desalojos y ocupaciones de haciendas son constantes en el país, aunque al parecer esta es la primera vez que se registra un hecho de esa magnitud. Los grupos de "sin tierras" acusan al Estado de haber cedido ilegalmente terrenos a latifundistas y productores agrícolas, principalmente durante la dictadura del general Alfredo Stroessner (1954-1989).

durante el desalojo de una hacienda en el noreste de Paraguay. FAVIAN ACOSTA / AFP/Getty Images
Ante esta situación, el equipo de Fe y Alegría - Paraguay lanzó el siguiente comunicado:
<< Afrontamos un momento crítico en el que las históricas reivindicaciones de los grupos más vulnerables - que son los campesinos - cuyos reclamos han sido postergados sine die y encajonados, no se los han tenido en cuenta o se los han atendido de manera irresponsable. Se han dado "soluciones parches" a los problemas que son mucho más serios y que tienen que ver con verdaderas políticas de Estado y el deseo de superar las inequidades flagrantes en la sociedad paraguaya.
Ante la muerte violenta de varios agentes del orden cumpliendo su misión como soldados y como parte del sistema de seguridad interna, ante el final cruento de las vidas de una decena de campesinos anónimos, el tendal de heridos que quedan, y las graves consecuencias que ya están teniendo y tendrán estos hechos, nos sentimos profundamente dolidos, hacemos llegar nuestras condolencias a las familias de policías y campesinos, y afirmamos nuestra convicción de que la violencia no es el camino aceptable para llegar a soluciones duraderas de nuestros problemas nacionales.
Estamos a favor de una investigación seria de los hechos y las responsabilidades en este deplorable acontecimiento, sin excluir la investigación de todos los actores directos e indirectos del caso. El contexto político y social que vivimos nos exige una mirada crítica de los acontecimientos, teniendo en cuenta la posible instrumentación, manipulación e infiltración de interesados en crear una situación de inestabilidad con fines políticos. No será la primera vez que esto ocurra en nuestro país en el marco de las luchas campesinas.
Lo que queda claro es que se están sacrificando vidas humanas, vida de paraguayos, enlutando familias y dejando en la orfandad a niños y niñas que tendrán que afrontar la vida y a quienes habrá que explicar alguna vez la forma en que fueron muertos sus progenitores.
Creemos que la lucha campesina por la tierra es una causa a todas luces justa desde una valoración objetiva, sin entrar en interpretaciones ideológicas ni de las manipulaciones que puedan existir en su búsqueda.
No se solucionarán los problemas si nos abocamos a etiquetar a los representantes de los distintos sectores, sean policías o campesinos. Tampoco desaparecerán los problemas con cambios de hombres en algunas esferas gubernamentales ni con acusaciones a uno u otro poder del Estado. Solamente habrá cambios en el país cuando haya políticas de Estado que atiendan los intereses y reclamos justos de los sectores más pobres, aquellos que desde antaño vienen reclamando un pedazo de tierra para responder a las necesidades de sus familias. Habrá cambios cuando se apliquen las leyes existentes en cuanto a la tenencia de la tierra, tanto en la región oriental como también en la occidental, y ésta, es responsabilidad de todos los participantes del gobierno: Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
La Asociación Fe y Alegría, que trabaja con sectores vulnerables del campo y la ciudad, pide a las esferas gubernamentales la atención de las reivindicaciones sin más miramientos y el cumplimiento irrestricto de la ley en cuanto a la tenencia de la tierra, que lleve a la implementación de una Reforma Agraria Integral.
Hace un llamado a las autoridades nacionales, a las fuerzas del Orden, a los actores intervinientes en el lugar de los hechos, a actuar con tranquilidad y transparencia, a promover la pacificación y a evitar más derramamiento de sangre y el sufrimiento y enlutamiento de familias pobres (tanto de policías como de campesinos). De igual manera, hace un llamado a valorar la vida, a respetar los derechos de todos los paraguayos y paraguayas, independiente de su responsabilidad y posición social.
Exhorta a las autoridades nacionales, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, que en estos momentos difíciles para todos los paraguayos y paraguayas, se efectivice la atención a los reclamos campesinos y se brinde seguridad a todos los habitantes de la república.>>